DIRECCIÓN DE PROYECTOS: LA ACTUALIDAD

Por - CNEC
21-04-21 12:56

“La verdadera excelencia es un producto de la sinergia”. 

Mack Wilberg


Como consultores, vivimos generalmente en un ecosistema de proyectos o iniciativas, con diferentes enfoques que van evolucionando y buscando cada vez mayor agilidad y alineación a la realidad contemporánea. Como directores y gestores de proyectos, nos encontramos actualmente con ambientes presenciales, virtuales, digitales y/o una combinación de ellos; de igual forma, algunas veces, con una dispersión geográfica y de usos horarios de los miembros de nuestros equipos, así como con una serie de herramientas que surgen y se multiplican, ofreciéndonos agilizar nuestra función.


La óptima asimilación e integración de los elementos anteriores nos permitirá reducir el riesgo en nuestras encomiendas; en otras palabras, la dirección y gestión de proyectos también deben evolucionar, manteniendo la sincronía como premisa básica, lo que nos invita a conocer qué hay de nuevo en esta importante disciplina desde tres aspectos que se conectan uno a otro para acercarse a los resultados que construimos:


Contexto social 


Según el Instituto de Administración de Proyectos (PMI, por sus siglas en inglés), en su documento “Mega tendencias 2021”, hay cinco macro tendencias que continuarán generando atmósferas que impactan la vida cotidiana y que de alguna manera tienen repercusión en nuestros proyectos: el COVID-19, la crisis climática, los movimientos civiles y cívicos, los cambios en la dinámica de la globalización y la inteligencia artificial.  De igual forma, incluye una recomendación para que las organizaciones cuenten con “multiplicadores” para lograr, en ese entorno, un efecto sostenible en los proyectos que ejecuten, sean de la naturaleza que sean; esos “multiplicadores” son los siguientes:

  • Hacer de los proyectos de impacto social una prioridad estratégica.    

  • Fomentar ecosistemas de asociación abiertos e innovadores. 

  • Repensar y ampliar las relaciones con los clientes y las partes involucradas (stakeholders).


Este último punto también es referido por el Foro Económico Mundial, la gestión de los llamados “stakeholders” se amplía aún fuera de nuestra organización, haciendo el ecosistema de cambio más amplio, integral y con alta necesidad de conocimiento de necesidades de todos nuestros stakeholders y en algunos casos, incluso colaboración a nivel sociedad.


Contexto organizacional


En lo que respecta a la dirección y administración de proyectos dentro de las organizaciones, ese mismo Instituto (PMI), nos recomienda, en su capítulo de Budapest, realizar la siguiente transición para reducir los riesgos que cualquier proyecto puede traer:

Sin duda, recomendaciones de valor para mimetizarnos a la contemporaneidad, pero manteniendo el núcleo u objetivo central como directores o gestores de proyectos, que es implementar una estrategia a la realidad y cultura de nuestra organización.


Contexto personal


El tercer elemento a considerar es la sinergia dentro del grupo de individuos participantes en toda iniciativa o proyecto; me permito referirme al modelo en que se basan la mayoría de las metodologías de cambio organizacional contemporáneas: el modelo de cambio de J Kotter, que nos sugiere tener en consideración las siguientes premisas para nuestra función como directores o gestores de proyectos, las cuales parafraseo, de acuerdo con mi experiencia:


  1.  Crear un sentido de urgencia (sin caer en exageraciones).

  2. Formar una coalición (el trabajo en colaboración siempre es la diferencia).

  3. Crear visión estratégica (asegurarse que todos entiendan hacia dónde vamos).

  4. Comunicar la visión (realmente transmitir mensajes con significado).

  5. Eliminar los obstáculos (una gestión de riesgos efectiva).

  6. Reconocer y celebrar triunfos a corto plazo (es parte esencial del liderazgo).

  7. Consolidar mejoras y seguir avanzando rumbo al objetivo (constancia y disciplina).

  8. Institucionalizar y/o arraigar los cambios en la cultura organizacional (sin este paso, los anteriores 7 no han valido la pena).



Conclusiones


Pese a la sofisticación y complejidad actual, la cual sin duda hay que comprender y adoptar, hay un elemento esencial para todo tipo de iniciativa o portafolio de iniciativas dentro de una organización, y el omitirlo o minimizarlo pueden conllevar el riesgo de convertir nuestros proyectos en acciones interesantes, de valor, pero no siempre conectadas o trascendentales. Este elemento es la sinergia. 


Identificando objetivamente el contexto social y económico que nos rodea, discerniendo entre las diferentes tendencias en dirección y gestión de proyectos para organizaciones y madurando modelos de cambio, nos acercaremos al enfoque que se alinea de mejor manera a nuestra visión y podremos mitigar el riesgo de trasladar vicios de la gestión tradicional a los ambientes digitales o virtuales; así como asegurar un continuo crecimiento y aprendizaje, como nos lo pide la deontología de nuestra profesión como consultores.



Por: Maria Elena Salazar 
Consultora especializada en Transformación y Alineación Estratégica de Procesos. Ha participado en proyectos de alta complejidad en diversas industrias del sector privado en México, Norte, Centro y Sudamérica, Asimismo, se ha desempeñado como consultora en la Administración Pública Mexicana. Ha escrito para publicaciones en México y EU relacionadas con transformación, liderazgo y responsabilidad social. Tiene también experiencia como profesora universitaria.

CNEC





SOLICITAR INFORMACIÓN
Nombre*
Apellidos*
Empresa*
Correo electrónico*
Teléfono
Sector
Comentarios